Estamos a fines del año 2021 y el país atraviesa un clima de alta conflictividad social y política. El ámbito laboral no es la excepción, pues incluso desde el Poder Ejecutivo y parte del Legislativo se viene promoviendo la reivindicación de demandas laborales.
Resulta crítico estar preparados para prevenir y gestionar los conflictos laborales que pueden surgir en la empresa y evitar afectar el desarrollo de las actividades que finalmente buscan regularizarse.