En el contexto de la pospandemia, los empleadores se enfrentan a diversos desafíos como el rápido aumento de los costos, dificultades para involucrar, atraer y retener talento clave. Así, ejecutar la estrategia de beneficios laborales de manera adecuada se vuelve cada vez más desafiante, según la Encuesta de Tendencias de Beneficios 2023 de la multinacional Willis Towers Watson (WTW) en América Latina y el Perú. ¿Qué detalles reveló dicho estudio?
Alvaro Cristi, líder de Salud y Beneficios de WTW para Latam, señaló que el mayor porcentaje de jefes de Recursos Humanos encuestados en Perú (63%) y la región (77%) ubicó a la competencia por el talento como la cuestión que más influye en la estrategia de beneficios el 2023. Hace dos años, dicho aspecto no era advertido por esos ejecutivos.
En la actualidad, la dificultad para encontrar perfiles que respondan a los nuevos retos de la pospandemia y de los cambios tecnológicos intensifican dicha competencia. En ese sentido, consideró que las empresas no solo deben enfocarse en tener una cartera de beneficios por encima del promedio del mercado, sino también un plan para visibilizarlos.
“La encuesta de percepción y focus group son excelentes herramientas para sensibilizar los espacios de mejoras para estos programas”, comentó a Gestión. Recordó que el aspecto clave el 2021 fue los avances tecnológicos.
Para Jessica Alzamora, directora de la Maestría en Organización y Dirección de Personas de ESAN, el retorno a la presencialidad y la inflación han agudizado la competencia por el talento. En algunas empresas, refirió que el llamado a trabajar en oficinas ha hecho que los empleados consideren la posibilidad de cambio y que los potenciales candidatos evalúen si esta propuesta esta alineada a sus intereses.
En tanto, la inflación ha aumentado el costo de vida y con él las expectativas salariales de los trabajadores. “Esta dinámica ha ejercido mayor presión haciendo que las empresas busquemos desarrollar estrategias de reclutamiento y retención más sólidas como paquetes de beneficios cada vez más competitivos que no solo consideren el aspecto monetario, sino que cubran diversos incentivos emocionales”, declaró a Gestión.
Por su parte, Luis La Madrid, docente de Gestión Talento de Pacífico Business School, sostuvo que el impacto de la pandemia en la competencia por el talento ha sido multifacético y ha dependido de varios factores, incluyendo la región, la industria y la evolución del mercado laboral en general.
Trabajo flexible y aumento de costos
En el estudio del 2023, la segunda y tercera cuestión que más influyen en la estrategia de beneficios en Perú son las modalidades de trabajo flexibles (51%) y el aumento de costos (49%), respectivamente. En América Latina, dichas posiciones se invierten.
Sobre la modalidad de trabajo flexible, Cristi explicó que la mayor preocupación en Perú frente a la región respondería a que las empresas locales buscaron volver a tener a sus empleados de forma presencial, generando un impacto en ellos. Ahora, dicha situación cobra relevancia en las políticas de beneficios.
En el caso de los costos, refirió que la relevancia de este aspecto en Perú responde al incremento de las tarifas de los seguros de salud ante el aumento de la frecuencia de atenciones y siniestralidad en los años de pandemia. Asimismo, recordó que el contexto poco competitivo de la oferta de este servicio también juega en contra.
“Todos estos factores estratégicos, desde la perspectiva de los beneficios, deben ir alineados a la cultura organizacional de la empresa, por lo que es importante que los líderes de equipos sean los
promotores de estas acciones, para así seguir potenciando la experiencia de los trabajados en la empresa”, anotó el representante de WTW.
Áreas claves de la estrategia
En el enfoque de los beneficios laborales, la encuesta de WTW indica que el bienestar es el área clave más importante en Perú (61%) y América Latina (53%) el 2023. En ese aspecto, Cristi destacó la importancia de un abordaje amplio, considerando aristas como el bienestar mental.
Ante los cambios traídos por la pandemia, los empleados enfrentan necesidades más allá de solo condiciones adecuadas de trabajo. En segundo y tercer lugar de las áreas clave en Perú se ubicaron la satisfacción y el costo del plan.
“Hay un foco actual en beneficios que satisfacen las necesidades de los empleados en torno a su salud física, mental y de bienestar, y programas que mejoran la carrera de los empleados para alinearse con entornos de trabajo flexibles”, refiere el estudio.
Factores que afectarán el presupuesto
Para los próximos dos años, WTW consultó sobre los factores que impactarían significativamente en los presupuestos de beneficios laborales en las empresas. En Perú, los aspectos críticos señalados fueron el debilitamiento de la economía (49%) y la persistencia de la inflación elevada (48%).
En el 2023, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) estima que la economía peruana solo crecerá 1.1%, afectando así las expectativas de ingresos de las empresas y, por ende, las proyecciones de recursos para destinar a beneficios laborales. En tanto, la inflación nacional en los últimos 12 meses a julio llegó a 6.02%, según el Instituto Nacional de
Estadística e Informática (INEI).
Sin embargo, esta preocupación de los empleadores por las implicancias de la economía y el alza de costos en los beneficios laborales no es exclusiva de Perú. En América Latina, este segundo factor es el primer aspecto destacado por las empresas para los siguientes dos años.
En esa situación, Alzamora opinó que las políticas de beneficios laborales deberán ser revisadas y probablemente se tendrán que adaptar al nuevo contexto. Así, esa modificación deberá pasar por un proceso cuidadoso de análisis y creatividad para equilibrar las necesidades de los empleados con la gestión eficiente de costos.
«Las empresas deberan continuar siendo atractivas para sus colaboradores actuales y el talento calificado fuera de la organización, pero sin que eso decante en costos laborales excesivos. Es probable que en algunas organizaciones también tome mayor relevancia la negociación colectiva. Definitivamente esto se constituirá en todo un reto”, advirtió.
De igual manera, La Madrid estimó que la desaceleración económica y la inflación pueden llevar a las empresas peruanas a ajustar sus políticas de beneficios laborales. Anotó que la magnitud y naturaleza de los ajustes dependerán de la situación y la estrategia de cada compañía.
“Hay sectores como el de minería, gas, petróleo, energía y materiales de construcción que no se han visto afectados por la situación económica en general, mientras que otras industrias, incluyendo la de pesca industrial, están teniendo que manejar situaciones muy complicadas, que con seguridad les dejará perdidas sustantivas”, aseguró.
Hacia una mirada más amplia de bienestar
Rosa María Fuchs
Jefa del Departamento Académico de Administración de la Universidad del Pacífico e investigadora CIUP
El concepto de bienestar, más que cambiar, se ha ampliado porque el escenario también se ha expandido. El paradigma actual ha trasladado una parte de la oficina y de sus quehaceres, al hogar, a la autopista, los cafés y, en general, a cualquier rincón con una buena señal de Internet y un espacio para acomodarse, encender una cámara o “asistir” a una reunión de emergencia.
Desde detalles tan olvidados como la ergonomía de un teclado hasta algo mucho más complejo como el balance trabajo-vida, las empresas han empezado a rearmar los rompecabezas del bienestar laboral.Naturalmente esto rebasa las fronteras de las tradicionales facilidades laborales y nos lleva a pensar en este futuro prematuro en el que el foco ya no es el trabajador sino la persona.
Siempre debió ser así, pero en estos días las organizaciones además de guiar sus marcas al teatro de operaciones de la competencia por cuotas de mercado, deben tomar las precauciones necesarias para que sus colaboradores se mantengan más motivados, con ganas de quedarse y protegidos contra el burnout.
La salud mental ha pasado a ocupar un rol fundamental en las organizaciones. Se ha tomado mucha conciencia de que debemos velar por aspectos como el manejo del estrés. Las empresas están implementando programas con actividades que permiten que los trabajadores se relajen o realicen alguna actividad física. Lo más importante es que la salud mental se ponga sobre la mesa y se trabaje sobre ella. Por mucho tiempo permaneció oculta, incluso por parte de los trabajadores por temor a ser estigmatizados.
CLAVES
FICHA TÉCNICA:
Fuente : Diario Gestión