En un futuro cercano, el avance de la inteligencia artificial (IA) generará un gran impacto en las relaciones laborales, tal como se conocen hoy en día, por lo que se hace necesario que los trabajadores se perfeccionen y modernicen para que se adecúen a los nuevos tiempos, afirmó el abogado César Puntriano Rosas.

A propósito de la publicación de su libro, Las tecnologías de la información y de las comunicaciones y las relaciones de trabajo, el experto abordó con el Diario Oficial El Peruano los diversos aspectos del impacto derivado del uso de las modernas herramientas tecnológicas en los vínculos del empleador con su personal.

A distancia

“Desde el punto de vista de la manera como se ejecuta el trabajo, hoy, en pleno siglo XXI, mucha actividad laboral se efectúa a distancia, en la que ya prácticamente no existen los locales físicos, sino se habla de oficinas virtuales. Esa idea, hace 10 años, en el Perú no existía, o si existía era de una manera muy limitada”, refirió.

El especialista sostuvo que el impacto de la IA en las relaciones laborales no solo se limita a lo que es la regulación laboral como tal, pues ya se utilizan estas herramientas para la selección de personal, tomar decisiones en materias de contratación, evaluación de desempeño y despido. “Incluso, ya se oyen de algunas decisiones judiciales que se basan en la inteligencia artificial”, resaltó.

“Entonces, qué duda cabe que, en los próximos años, en un futuro no muy lejano, la inteligencia artificial tendrá un mayor impacto en las relaciones laborales y uno de los temas que siempre se pone sobre el tapete es el hecho de que mientras más crezca la IA o mientras más se desarrolle, ello suponga una pérdida de empleo”, indicó.

Para el experto, es relativo porque “con el tiempo las relaciones laborales tienen que irse transformando, se deben adecuar a las nuevas épocas y también los empleos e indudablemente la inteligencia artificial ocupará algunos roles que hoy en día son puestos de trabajo muy mecánicos. Por lo tanto, el trabajador debe irse perfeccionando, modernizando y adecuando a los cambios”.

Recuento

Puntriano reveló también que, entre otros aspectos, su obra plasma un recuento de cómo cambiaron las relaciones laborales en el tiempo y se transformaron de la mano con las tecnologías de la información y comunicaciones (TIC). “Por ejemplo, esta noción clásica de que el empleador era la persona física, el dueño del negocio era a su vez el gerente general y quien físicamente monitoreaba a sus subordinados, se fue perdiendo en muchos sectores económicos”, anotó.

“Hoy en día vemos personas jurídicas que tienen una multiplicidad de accionistas; empleadores que no son personas jurídicas que son entes sin personería jurídica, como ocurre con los consorcios; o supuestos en los cuales puede haber más de un empleador, como ocurre con los grupos empresariales; o las relaciones triangulares, que se manifiesta con la intermediación laboral”, detalló.

Todo, dijo, obedece a un cambio, una evolución e, incluso, existen casos en los cuales hoy se materializan algunas relaciones laborales en las que ni siquiera se habla de la noción de empleador o de trabajador, como pasa con las aplicaciones.

“Se usan mucho las apps en los celulares para adquirir ciertos bienes o servicios, pero ahí se pone en tela de juicio la existencia de una relación laboral y de un empleador, lo cual también tiene como base justamente el impacto de la tecnología”, aseveró.

Eso, por un lado, la manera cómo se va transformando la relación laboral y, por otro, también hay un cambio en la manera como se realizan las labores con este trabajo a distancia o teletrabajo, que está normado en el país y que también se trata en el libro, recalcó.

Puntriano mencionó que otro impacto que se ve en las relaciones laborales a partir del advenimiento de las TIC es la manera de cómo el empleador ejerce su poder de dirección. “¿Por qué? Porque ya cambia ese estilo de control que suponía una supervisión física inmediata del trabajador”, expresó.

Cámaras

“Hoy en día, la supervisión se realiza con el empleo de las TIC, mediante las cámaras de videovigilancia, el acceso al correo electrónico, a las computadoras de los trabajadores, el uso de los GPS, entre otros”, explicó.

El abogado sostuvo que todas esas nuevas manifestaciones del poder de dirección empresarial traen siempre un debate. “Hasta dónde el empleador puede poner cámaras en los centros laborales, acceder a correos, escuchar y grabar conversaciones telefónicas, monitorear a qué página web entra el trabajador, cuánto tiempo está conectado o no lo está, cuántas veces teclea el computador para saber el tiempo de trabajo”, señaló.

“Todo eso en materia jurídica no está exento de discusión, porque, por un lado, tienes al poder de dirección empresarial que se deriva de la libertad de empresa, que está en la Constitución, y por otro, figuran los derechos de los trabajadores y no solo los laborales específicos, sino también a inespecíficos y los constitucionales, la dignidad, la integridad, la protección de datos personales, que también se trata en cierta medida en el libro; todo eso derivado del uso de las TIC”, puntualizó.

Proceso de transformación

César Puntriano explica que su libro comienza con una introducción al impacto de la inteligencia artificial y cómo se transforman las relaciones laborales, mediante la triangulación empresarial, los grupos de empresas y de las plataformas de servicios.

Además, indica, se trata el trabajo a distancia y las TIC; el teletrabajo y su regulación, la desconexión digital, que es muy importante para garantizar este derecho fundamental al descanso que tienen los trabajadores.

“Desde mi punto de vista, la desconexión digital no es un derecho, es una garantía para los trabajadores porque el derecho al descanso siempre existió, lo que pasa es que se necesitaba una garantía puesta en blanco y negro en la ley para que se cumpla”, aseveró.

El experto reveló que se explica cómo se instrumentaliza el poder de dirección con las nuevas tecnologías, el derecho a la protección de datos personales, la videovigilancia laboral, el acceso al correo electrónico laboral, la escucha de llamadas y el impacto laboral de las redes sociales.

A la par, señaló, se presentan algunos supuestos en los cuales podría afectarse los derechos laborales fundamentales con el uso de las TIC si es que no se modulan adecuadamente; así como del ciberacoso laboral.

Fuente : Diario El Peruano